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El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Instituto de Crédito Oficial (ICO) destinarán un total de 800 millones de euros a autónomos y microempresas con el objetivo de "asegurar que el crédito llega a los emprendedores y a los jóvenes que quieren convertir sus ideas en negocios".
En un comunicado, ambos organismos señalaron que el BEI facilitará al ICO 400 millones de euros que la entidad española completará con otros 400 millones adicionales.
En la firma del acuerdo, celebrada en Madrid este martes, la vicepresidenta del BEI, Emma Navarro, destacó que el acuerdo demuestra "el esfuerzo del BEI por seguir llevando las ventajas de su financiación no solo a los grandes proyectos, también a las empresas de pequeño tamaño, fundamentales para la creación de riqueza y empleo en España".
"Es, además, una nueva muestra de la estrecha relación entre el banco de la UE y el ICO y un ejemplo de cómo la colaboración entre ambas instituciones permite disponer de instrumentos financieros que contribuyen a dinamizar la economía española", añadió.
Por su parte, el presidente del ICO, José Carlos García, señaló que "esta operación es una nueva muestra del objetivo común de apoyo al tejido empresarial español que une a ambas instituciones y refuerza el papel del ICO como entidad de referencia en la financiación de proyectos de autónomos y microempresas". En este sentido, García resaltó que en 2017 el 66,5% del total de préstamos concedidos por las Líneas ICO fueron suscritos por empresas de menos de diez trabajadores.
"Los fondos del BEI e ICO ofrecerán a las pequeñas empresas y autónomos financiación en condiciones favorables, tanto en términos de vencimiento como en tipos de interés, para que dispongan del crédito necesario que facilite su crecimiento y la mejora de su productividad", detallaron ambas entidades.
Este acuerdo es la segunda operación que el BEI firma con el ICO dirigida específicamente a los autónomos y microempresas para la financiación de pequeños proyectos en los sectores industrial y de servicios. La anterior se lanzó a finales de 2015 y benefició a más de 10.000 microempresas, la mayor parte de ellas con menos de tres empleados. De media, recibieron un crédito de 28.000 euros para poner en marcha sus proyectos.
FUENTE: EL ECONOMISTA
